Al comenzar el tratamiento con insulina, tu médico va a buscar la dosis más efectiva. Es necesario que tengas un contacto permanente con él y tu equipo de salud.

En esta etapa es fundamental respetar tus rutinas:

• Horario de las comidas. No pases más de 3 horas sin comer algún alimento.
• Comé la cantidad adecuada de alimentos, ni más ni menos. Comé los alimentos que te ha recomendado la nutricionista.
• Continuá con el monitoreo o mediciones de glucemia según lo indicado, sin saltear ninguna de las mediciones.
• Preguntale a tu médico si necesitás ajustar la dosis de insulina, los días que hacés actividad física.
• Si hay alguna situación por la que no podés cumplir con alguna de las indicaciones, conversalo con tu médico.